El niño parecia dormido pero podía ver con los ojos cerrados todo lo que habitaba a su alrededor pero ese mundo que el conocía era totalmente diferente dentro de su cuarto donde descansaba el muchacho se envolvía una especie de niebla espesa en la que el niño podía ver claramente en ella unas entidades que se mezclaban con ese humo denso y de cual nunca se les veía los pies.
El los definía como si flotasen a su alrededor pero sin aire alguno en el ambiente.
Los ojos de estos seres eran profundos grandes cristalinos oscuros y sin vida .Pero lejos de temerles el niño sentía curiosidad metiéndose de lleno en el vacío de aquel lugar.
Llego hasta uno de ellos y este al mirarle le empezó a envolver .Y como si de hilos invisibles se tratasen el niño quedo inmóvil.
Allí pudo ver como aquellos seres ahora se podían mover .Todos menos el.
Y fue así como toda esa oscuridad empezó a remitir al poder enseñarles al niño todo el sufrimiento que ellos sentían al estar inertes .
Este entonces lloro por ellos pidiendo su perdón y fue entonces cuando aquella hermosa luz apareció ante sus ojos ; la cual iluminó toda la habitación desapareciendo por siempre esos entes sin vida que solo pedían ser ayudados.
Inma R
sábado, 15 de agosto de 2015
VISITANTES DE ALCOBA
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